Omar Narváez retuvo su cetro supermosca OMB al derrotar por puntos y en fallo unánime, al puertorriqueño César Seda Jr. En el ring del Club Estudiantes de Bahía Blanca, se desplegó una pelea emocionante, donde el argentino prevaleció gracias a su experiencia, siempre pensante y sin tirar golpes a ciegas. Fiel a su estilo, Narváez realizó así su segunda defensa del título supermosca en la velada de anoche.
César Seda Jr (20-1-0, 15KO) probó por primera vez la derrota, ante el invicto Omar Narváez (34-0-2, 19KO). Reinó la experiencia del campeón para ganar la batalla que prometía un pronóstico reservado. El boricua, no supo resolver la estrategia de su rival y se vio derrotado en las tarjetas por fallo unánime, al término de los doce rounds.
En el choque más difícil de Seda (para algunos también el de Narváez) demostró que no vino a Argentina para ser tan sólo una estadística en las defensas del título del chubutense. En los primeros rounds, el puertorriqueño salió a demoler a su rival. El campeón se mantuvo con guardia cerrada, eludiendo y tirando algunos uno-dos, para estudiar al aspirante. Seda llegó con volados de izquierda en repetidas veces, pero el argentino se defendió bien. De a poco, la estrategia de ambos se vio sobre el ring. El visitante se mostró más activo y salía a dominar en cada asalto.
El tercer round cambió de dueño. El “Huracán” se paró de contraataque y fue así como sacó los mejores dividendos en el comienzo de la pelea. Narváez llegó en repetidas ocasiones con su derecha en cross que se colaba en la defensa de “Junito”. Seda amainó su velocidad y fuerza sobre el cuarto capítulo y la figura del campeón se agigantó aún más sobre el entablado, cada tres minutos.
Le campana anunció la quinta vuelta, donde el árbitro estadounidense Raúl Caiz ordenó a los jueces que le resten un punto al puertorriqueño tras varias advertencias por golpes bajos. La sexta etapa fue toda del argentino, que llegó a su antojo con ambas manos arriba y abajo. El retador no pudo cambiar el curso de la pelea y se vio abrumado ante un Narváez que lo que tiró, llegó. Hasta hizo sentir una mano izquierda al rostro del centroamericano. Cuando le tocó defender, el "Huracán" dio cátedra, porque esquivó y se desplazó como si tuviera la misma experiencia, pero veinte años menos.
En el séptimo round, el demandante al título de las 115 libras se plantó para atacar. Fueron tres minutos parejos y para uso de una lupa de quien fallaba la pelea. Por su parte, Narváez tiró una limpia derecha en cross. El segmento siguiente también tuvo casi las mismas características, Seda salió para repartir distintas combinaciones pero el actual poseedor del record de defensas de títulos mundiales de Argentina, puso en su lugar al retador con una izquierda en punta. Seda perdió su hilo y fue más impreciso.
Sobre el décimo y onceavo asalto, Narváez fue claro dominador. Su contraataque y sabia forma de administrar los golpes, lo dejó mejor parado que al, hasta ese entonces, invicto con 20 peleas en su haber, que tiró fuerte pero como pudo, pero el sudamericano se mostró escurridizo y con mejor movilidad.
“Ultimo round, últimos tres minutos” se escuchó en el cuadrilátero. Seda sacó a relucir su pegada. Administró ráfagas de puños que pusieron en apuros al argentino, sin embargo, éste no se achicó y también propuso golpes. Los tres minutos finales, el boricua salió con toda la garra para poder terminar por nocaut al oponente. Sin embargo, sus 25 años y 15 de 20 peleas ganadas por la vía del cloroformo, no fueron suficiente para derrocar a un Narváez que tiene en su historial veinte peleas mundialistas, de las cuales dieciocho fueron para defender su cinturón.
Las tarjetas reflejaron la pelea, cuando el estadounidense Levi Martínez y Luis Doffi, de Argentina, fallaron 117-110 para el campeón. Por su parte, el otro norteamericano, Donald Trella, vio la pelea más cerrada, ya que calificó con 115-112 para Narváez.
Luego de la pelea, Omar, una leyenda viviente del boxeo argentino, mostró su deseo de unificar títulos e ir a pelear al extranjero. También destacó que su contendiente “fue un rival digno, tenía la mano dura” pero que el estuvo “más movedizo e inteligente”. Agregó que “fueron doce rounds duros" y que "es un boxeador fuerte”.
César “Junito” Seda demostró que es un posible futuro campeón, tiene condiciones, pero con Narváez como actual campeón, la corona de los supermosca OMB tiene un único dueño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario